Con la rotoenfardadora 5888 llegó a la dimensión de las máquinas automáticas que pueden ser usadas por un mercado masivo.
Lograr un rollo de 900 kilos, “adelgazando” el tiempo de expulsión a 40 segundos. Es la fórmula que Mainero encontró en su nueva rotoenfardadora 5888.
Con 5 patentes presentadas por las innovaciones que incorpora el equipo, la empresa se desplaza hacia una nueva dimensión en máquinas automáticas para confección de reservas forrajeras.
Marcos Formica, del área de Investigación y Desarrollo de Mainero, desgrana en diálogo con Maquinac todos los detalles de una rotoenfardadora que marca rumbos a escala global.
Salto
¿En qué escala de la evolución hay que colocar a la 5888?
No hay en el mercado argentino ninguna rotoenfardadora automática. Y también en el resto del mundo hay pocas rotoenfardadoras automáticas.
Llamamos automática a toda máquina que tenga el ciclo de expulsión del rollo sin depender del operador.
El automatismo arrancó a fines de los años ´80 con Hesston y el diseño de máquinas automáticas y de grupo hidráulico independiente.
Fue una tecnología que la gente no adoptó en ese momento por la complejidad que representaba.
¿Cuál fue la visión de Mainero sobre el tema?
Nosotros siempre tuvimos la aspiración de llegar a una máquina automática.
Hace ocho o diez años empezaron a aparecer máquinas automáticas que usan el sistema hidráulico del tractor.
Pero ese sistema hidráulico del tractor tiene que ser de centro cerrado, con lo que queda afuera el 90% de los tractores que están disponibles para rotoenfardadoras.
Y otra tendencia fue ISOBUS. En muchos casos, la máquina debe tener ISOBUS para entrelazar la central de la máquina y la central del tractor y con eso logran el automatismo.
Pero volvían a quedar afuera todos los tractores para rotoenfardadoras.
Límites
¿Qué trabas debió vencer el automatismo?
El desafío del automatismo era llegar al público masivo o a la mayor parte del mercado que tiene tractores de sistema hidráulico de centro abierto y potencia media.
La gran innovación de la rotoenfardadora 5888 es que puede funcionar con un tractor de sistema hidráulico de centro abierto.
La 5888 puede ser accionada con sistema hidráulico de centro abierto y de centro cerrado. Mediante una válvula, el operador puede pasar de un sistema al otro, sin inconvenientes.
Esta característica pone el automatismo a disposición del mercado en general y no deja afuera a ninguno de los usuarios potenciales de una rotoenfardadora.
¿Cómo se logró la conectividad?
La conectividad la logramos con nuestra tecnología, que en este caso es el monitor Max100.
Ya cuando habíamos hecho el monitor, previmos el automatismo. Se le agrega el nodo hidráulico que gestiona las electroválvulas que comandan el automatismo.
Pero la máquina queda autónoma y sólo toma del tractor la potencia en tres formas. Mecánica, mediante la toma de potencia; eléctrica para accionar el monitor y los actuadores eléctricos; y la hidráulica para la gestión de la expulsión del rollo.
Creatividad
¿Cuáles son las demás innovaciones de la 5888?
El otro salto grande que dimos es la densidad. Nosotros tenemos un tamaño de rollo que está estandarizado. No lo podemos modificar.
Tiene un diámetro de 1,80 metro y el ancho de la cámara que, en este caso, es de 1,56 metro.
Lo único que podemos hacer para mejorar el peso del rollo es darle más densidad. Y en esta máquina incrementamos un 35% la densidad.
Una forma de incrementarla es el recolector que es de ancho súper extendido, como lo llamamos. Tiene 2,45 metros.
De esa forma, podemos aprovechar mejor el volumen de pasto disponible. Entra más pasto y se comprime más cerca del lateral.
¿Ahí está un punto clave?
Es un desafío porque tenemos una tasa de alimentación de 30 kilos/segundo. A los 30 kilos/segundo le agregamos el doble de pasto que entra por fuera de la cámara.
Entra mucho más ajustado desde el recolector.
Hicimos una cámara de compactación nueva. La que estábamos usando venía del año ´94. Estábamos al límite de la capacidad de compactación.
Hicimos un diseño nuevo, mantuvimos la garganta abierta, modificamos la geometría de la garganta y modificamos el brazo y prensa.
La presión de la válvula sigue siendo la misma, pero modificamos la densidad del rollo en un 35%.
Traga más que la anterior y compacta más que la anterior y es automática.
Esenciales
La reducción de tiempos muertos ¿seguirá estando en el núcleo de las mejoras de las rotoenfardadoras?
Es un tema que nos desvela en las rotoenfardadoras. Hoy es difícil crecer en capacidad de tragada.
En su momento incorporamos el atador de red y logramos reducir el tiempo de atado a 5 segundos.
Y el tiempo muerto que nos quedaba era el de expulsión. El automatismo lo que nos permite es que la secuencia siempre sea óptima. Que no se pierda ningún tiempo.
El automatismo nos gana entre 3 y 4 segundos que utilizaba el operador en la expulsión del rollo.
¿Cómo se trabajó con los cilindros?
Pasamos los cilindros de prensa a simple efecto. Este tipo de máquinas, durante la expulsión, comparte el circuito hidráulico entre puerta y prensa.
Pasamos los cilindros de prensa a simple efecto y cuando abrimos la puerta, solamente va aceite a los cilindros de puerta y la expulsión es mucho más rápida.
Así bajamos el tiempo de expulsión en 5 a 6 segundos, un 30%, aproximadamente, pasamos de 15 a 16 segundos a 10 u 11 segundos, con 50 litros de caudal en el tractor.
Las correas siempre están tensas entonces las máquinas tienen mejor limpieza.
Maquinac
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